Seguros para motos

Seguros para motos

JUDIT FLORENSA

Para circular en España con tu moto es obligatorio tener un seguro de Responsabilidad Civil para cubrir los posibles perjuicios materiales y personales que se puedan generar en caso de accidente. Esto es lo mínimo que exige la Ley sobre Responsabilidad Civil y Seguro, aunque lo habitual y aconsejable es optar por una cobertura más amplia para cubrirte las espaldas ante cualquier percance.

Nos podemos encontrar en múltiples situaciones como inundaciones, incendios, robos, quedarnos tirados, que nuestra moto o equipamiento sufra daños, entre muchas otras circunstancias. Por lo tanto, debes considerar todas estas posibilidades, valorar qué es lo que quieres llegar a cubrir y analizar bien el uso que haces de tu moto. De ello va a depender en gran medida la prima de tu póliza.

 

Mujer piloto descansando, con la moto preparada y equipada con toda la equipación de seguridad.

Mujer piloto descansando, con la moto preparada y equipada con toda la equipación de seguridad.

 

¿Qué precio tiene tu tranquilidad?

El precio es siempre uno de los aspectos fundamentales a tener en cuenta en cualquier operación. También lo es a la hora de decantarnos por una póliza u otra, aunque te recomendamos no escatimar cuando se trate de elegir tu seguro.

La cifra a pagar puede ser muy diferente en función de las múltiples variables de las que depende. Tienes herramientas a tu alcance como los portales comparadores de seguros o bien el simulador particular que tienen la mayoría de compañías para hacer un cálculo aproximado en base a una serie de datos. Es una posibilidad que ofrecen algunas empresas como AMV, Pont Grup, PERIS o Mutua Madrileña. Aun así, te aconsejamos que contactes con todas las que te interesan porque el presupuesto final puede diferir ligeramente ya que se tiene en cuenta mucha más información.

Por otro lado, es importante evaluar las pólizas con franquicia porque, en este caso, también afectan a la prima. Lo más común es que, cuanto más alto sea el valor de la franquicia, menor lo sea el de la póliza ya que el asegurado asume una parte de responsabilidad económica. Puede ser una cifra fijada o bien un porcentaje del coste total de los daños.

 

Motorista circulando con precaución y con toda la equipación de seguridad y normativa.

Motorista circulando con precaución y con toda la equipación de seguridad y normativa.

 

Factores a tener en cuenta

  • ¿Qué moto tienes? La prima será una u otra en función de la marca, el segmento, el año, el modelo y si es eléctrica o de combustión. Por lo general, las deportivas suelen suponer un mayor desembolso.
  • Edad del piloto y fecha del carné. Los usuarios jóvenes pagarán cantidades más altas. Además, los años de licencia también influyen mucho, a pesar de que ello no implique tener más o menos experiencia. Si te acabas de sacar el A2, aunque lleves mucho tiempo circulando, serás considerado novel.
  • Cantidad de usuarios: El riesgo que asume la aseguradora es mayor a medida que añades personas a tu póliza.
  • Lugar de residencia y compañía aseguradora. La cifra también bailará según dónde vivas y con quién contrates tu seguro. Te sugerimos que pidas presupuesto a todas las que puedas para hacer una comparación rigurosa.
  • Tipo de uso: Nos referimos al kilometraje aproximado que prevés hacer al año y del radio en el que te muevas. También si tu moto duerme en la calle o bien en garaje o parking. Además, cambia mucho si solo la usas para commuting en la ciudad, si viajas con ella o bien si se trata de un vehículo de reparto.
  • Historial de siniestralidad: La prima se encarecerá proporcionalmente al número de siniestros en los que hayas sido culpable.
  • Cobertura: Los servicios que incluya tu póliza serán decisivos en el importe a pagar. No es lo mismo tener un seguro de Responsabilidad Civil que contar con uno mucho más completo.
  • Seguro gratis con la compra de tu moto. Hay algunos fabricantes que incluyen el seguro durante el primer año. Es una oportunidad interesante pero ten en cuenta que, por lo general, se trata de las opciones más básicas.

A todo esto, nos podemos encontrar en la situación que la compañía se niegue a hacer una póliza u ofrezca un precio desmesurado para ahuyentar a un posible cliente que no le interese por el motivo que sea. Es el caso, sin ir más lejos, de algunos perfiles muy concretos, como podrían ser los moteros más jóvenes que tengan una moto deportiva o de gran cilindrada.

 

Motero pidiendo ayuda a otros vehículos.

Motero pidiendo ayuda a otros vehículos.

 

Tipos de seguros disponibles

La oferta es tan amplia como la cantidad de usuarios que existen y sus necesidades específicas. En un extremo tendríamos el Seguro de Responsabilidad Civil, que es lo mínimo obligatorio que necesitas por ley y, en el otro, estaríamos hablando de un seguro a Todo Riesgo.

Entre estas dos posibilidades hay múltiples opciones intermedias para estar cubierto ante distintas situaciones. Es el caso de los daños por inclemencias como podría ser el granizo, o bien catástrofes como los incendios. Sumamos a la lista los actos de vandalismo como un robo total o parcial y los daños en tu equipamiento, ya sea casco, chaqueta, algún accesorio de tu moto, etc.

Por otro lado, podemos contar con más o menos asistencia en carretera, asesoramiento y protección jurídica o bien elegir entre distintos valores de indemnización por pérdidas o daños que generen gasto médico. Puedes tener o no derecho a moto de sustitución en tu póliza, además de servicio de grúa o reposición de llaves.

Y no podemos pasar por alto la existencia de las coberturas para casos más singulares. Estaríamos hablando, por ejemplo, de los seguros específicos para motos clásicas, que están pensados para aquellas que superen los 20 años de antigüedad. Otra situación sería la de aquellos que hacen viajes por el extranjero en moto, que podrían optar por un seguro específico para este trayecto.

Consecuencias de ir sin seguro

Circular sin seguro tiene consecuencias, podrían sancionarte con multas que oscilan entre los 600 y los 3000 euros, además de inmovilizarte la moto hasta que demuestres que has contratado una póliza. Te recomendamos que lleves un comprobante de pago junto al resto de documentación para poderlo mostrar en caso de que te paren. Podrías llegar a tener consecuencias penales si eres reincidente y probablemente tendrías problemas en un futuro a la hora de contratar una póliza. Además, en caso de ser el culpable de un accidente, tendrías que responder a título personal de todos los gastos derivados de los daños materiales y médicos de terceros.